La globalización es un fenómeno que ha transformado profundamente la economía, la política, la cultura y la ideología a nivel global. Según Mittelman (1996), la globalización no es un proceso guiado por la política, sino inducido por el mercado, resultando en una fusión de procesos transnacionales y estructuras domésticas que permiten la penetración de una nación en otra. Este fenómeno trae consigo tanto oportunidades como desafíos.Oportunidades y Desafíos de la Globalización
La globalización ha reorganizado gobiernos, economías y culturas a nivel mundial, ofreciendo nuevas oportunidades para el desarrollo económico y la innovación. Sin embargo, también presenta desafíos significativos, como la pérdida de control sobre los flujos económicos y tecnológicos, los cuales a menudo escapan a los marcos regulatorios existentes. Además, la globalización puede aumentar la desigualdad, amenazando el empleo y las condiciones de vida, lo que a su vez obstaculiza el progreso social.
Aspectos de la Globalización
Comercio Exterior: Ha habido un notable aumento en las exportaciones de bienes manufacturados, mientras que la participación de los productos primarios en el total mundial ha disminuido.
Movimientos de Capital: Durante los años noventa, hubo un fuerte aumento de los flujos de capital privado hacia los países en desarrollo, destacándose la inversión extranjera directa.
Migraciones: La búsqueda de mejores oportunidades laborales ha llevado a un incremento en las migraciones, mayormente entre países en desarrollo. Estas migraciones pueden llevar a una convergencia de los salarios a nivel mundial.
Difusión de Conocimientos: La inversión extranjera directa no solo expande el capital físico, sino que también fomenta la innovación técnica y la transferencia de conocimientos.
Globalización y Transculturación
La globalización también tiene un impacto profundo en los aspectos culturales, llevando a procesos de transculturación, donde las culturas se mezclan y transforman mutuamente. Según Ortiz (1978), la transculturación implica tanto desculturación (pérdida de elementos culturales propios) como aculturación (adopción de elementos culturales de otra sociedad).
Desculturación: Es la pérdida o abandono de los elementos culturales propios de un grupo debido a la influencia de una cultura dominante.
Exculturación: Proceso de extracción de una cultura de su contexto original, resultando en la pérdida de sus características culturales.
Aculturación: Adopción de elementos culturales de otra sociedad, integrándolos en la propia cultura.
Inculturación: Adaptación de una cultura dominante por parte de un grupo minoritario, integrando elementos en el contexto cultural local.
Ejemplos de Transculturación
Moda Rápida: Marcas globales lanzan colecciones que reflejan tendencias internacionales, haciendo que personas de diferentes culturas vistan de manera similar.
Televisión y Streaming: Plataformas como Netflix producen contenido específico para diferentes regiones, mezclando elementos culturales globales y locales.
Migraciones: Los trabajadores se desplazan en busca de mejores oportunidades, llevando consigo sus prácticas culturales y adaptándolas a nuevas sociedades.
La Importancia de la Transculturación
La transculturación no solo refleja la mezcla y adaptación de culturas, sino que también promueve una comprensión más profunda de la diversidad cultural y el diálogo intercultural. Las iniciativas contra hegemónicas que reflejan lo local y el diálogo con lo global son esenciales para mantener una identidad cultural propia en medio de la globalización.
Transformaciones Sociales Derivadas del Neoliberalismo
La globalización y las políticas neoliberales han llevado a una serie de transformaciones en los lazos comunitarios y en la manera en que se realizan las intervenciones sociales:
Lazos Comunitarios Debilitados: La conexión entre individuos dentro de las comunidades se ha debilitado, afectando el sentido de pertenencia y apoyo mutuo.
Intervención Social Técnica y Burocrática: Las intervenciones sociales han adoptado un enfoque más estandarizado, perdiendo la personalización y la adaptación a las necesidades específicas de cada comunidad.
Menos Espacios de Encuentro Colectivo: La reducción de espacios físicos y sociales para la interacción comunitaria ha limitado la capacidad de las personas para atender intereses comunes y trabajar juntos por objetivos compartidos.
Nuevas Formas de Promover la Acción Comunitaria
Para enfrentar estos desafíos, es necesario repensar la comunidad de manera no jerárquica, diversa y conectada en múltiples formas. Esto incluye:
Inclusividad y Flexibilidad: Promover nuevas maneras de acción comunitaria que sean más inclusivas y adaptables a las diversas necesidades y características de los miembros de la comunidad.
Justicia Social y Cambio Social: Enfocar las intervenciones en objetivos de justicia social, asegurando que se aborden las desigualdades y se promueva el bienestar colectivo.
La Modernidad y la Transformación de la Comunidad
La modernidad ha transformado la relación de las personas con el tiempo, el espacio y la comunidad:
Tiempo: La vida se vive en un flujo continuo de presente, donde lo histórico es reinterpretado para adaptarse a las necesidades actuales.
Espacio: Los espacios físicos se han convertido en "no-lugares" funcionales pero sin identidad, historia o significado personal.
Individuo: Las personas se disocian del entorno geográfico que habitan, afectando su sentido de identidad y pertenencia.
Sociedad Líquida y la Ruptura de Lazos Sociales
En la "sociedad líquida" descrita por Zygmunt Bauman, los lazos sociales tradicionales se disuelven, llevando a un aislamiento social y a una mayor responsabilidad individual:
Libertad y Desvinculación: Más libertad individual, pero también más inseguridad y responsabilidad personal.
Proyecto Individual: La vida se convierte en un proyecto personal, debilitando la capacidad de las comunidades para unirse y luchar por cambios colectivos.
Responsabilidad Individual: Mayor presión sobre los individuos para "triunfar" según estándares personales.
Nuevas Metáforas para Entender la Comunidad
Para abordar estas transformaciones, se proponen dos metáforas:
Metáfora Arborescente: Organización jerárquica y lineal de la comunidad, con un tronco principal y ramas derivadas.
Metáfora del Rizoma: Red compleja y no jerárquica, donde las conexiones se hacen en cualquier punto y en cualquier dirección, reflejando la diversidad y complejidad de las comunidades contemporáneas.
Nuevas Prácticas de Intervención Psicosocial
Se proponen nuevas prácticas para fomentar la articulación de la diversidad en la intervención psicosocial, como:
Terapia de Grupo Multicultural
Programas de Resiliencia Comunitaria
Círculos de Diálogo Intercultural
Intervenciones en Crisis con Perspectiva Multicultural
Reflexiones Finales
La globalización y la transculturación son fenómenos complejos y multifacéticos que impactan todos los aspectos de la vida humana. Desde la economía hasta la cultura, estos procesos remodelan continuamente nuestras sociedades. Comprender y evaluar estos conceptos es crucial para enfrentar los retos y aprovechar las oportunidades que presentan en el desarrollo de los Estados en la actualidad.
Es crucial investigar nuevas perspectivas teóricas y metodológicas, como la metáfora del rizoma, que fomenten procesos de acción colectiva fundamentados en la integración de diferencias. Respetar la diversidad y complejidad de las comunidades es esencial para lograr mayores niveles de igualdad y justicia social.
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Referencias:
Mittelman, J. H. (1996). Globalization: Critical Reflections. Lynne Rienner Publishers.
Ortiz, F. (1978). Transculturación y comunicación. Ediciones Cátedra.
Este artículo ha sido adaptado del contenido del curso de Psicología Social Comunitaria II dirigido por la Prof. María del Pilar Sandoval.